La mayoria de propietarios de perros no los lleva a un entrenamiento. Este hecho es aceptable si en casa, se toma la tarea de enseñarles su lugar en este nuevo entorno, y se logra poner en marcha su cerebro para colaborar con el humano, su nuevo líder.
Algunos perros, de cualquier manera, no reciben durante sus primeras semanas, el estimulo adecuado para convertirse en un companero que puede ser controlado en cualquier situación cotidiana a la que nuestro día a día nos lleve.
Sin embargo, aunque nuestro perro no haya recibido un entrenamiento diario y riguroso, puede llegar a ser controlado si sus necesidades básicas se llenan dentro de una rutina que tenga sentido para sus instintos caninos.
Estos dos Labrador Retriever, de 3 años de edad, nunca recibieron un entrenamiento. Al crecer se fueron haciendo fuertes y halaban a quien intentara llevarlos de paseo. Dentro de casa, ladraban a los visitantes y afuera, también a otros perros.
Al ser tratados con una actitud apropiada, ellos aprendieron a dejar de tirar de la correa, esperar para cruzar las puertas después de los humanos, seguir durante el paseo y sentarse al detenerse. Ellos recibieron un condicionamiento, que les permite ir aprendiendo de manera positiva durante el ejercicio.
Mientras los paseos se alargan, la energia tiende a bajar y el cerebro del perro entra a un estado menos tenso que cuando se siente ansioso por el encierro o por la llegada de la hora del ejercicio. Estos Labradores, tienen una alta energia, ya que son perros destinados a recobrar las presas durante la caceria, y en el ambiente de cualquier casa, no encuentran el estimulo suficiente. Ellos permanecen sentados si se les pide esto en un lenguaje adecuado, pero si ademas, ya han salido del estado de ansiedad que les provoca la inactividad fisica o mental.
Al final de la jornada, ellos regresaran a casa en un estado de tranquilidad, y después de haber descansado unos minutos se les concederá el permiso para beber agua y juguetear un rato. Mañana aprenderán algo nuevo.
La actitud de los Labradores en estas imagenes, nos muestra el desafío físico con sus bocas jadeantes y sus lenguas colgantes, mientras su compañero, siempre con la boca cerrada y las orejas atentas, ya acostumbrado a varias horas de trabajo, les comunica también el estado general...Todo esta bien!
En el siguiente video podemos aprecias la diferencia entre manada controlada y manada no controlada
Posted by Dog Gym El Salvador on Tuesday, February 1, 2011
